viernes, 2 de mayo de 2008

Por qué no soy 'single'


Me comentó una amiga que entiende de estas cosas que yo soy un single, lo que según ella está muy de moda. Pensé que me estaba hablando de discos; y respondí que siempre he preferido los L.P., que traían más canciones que los singles, pero resultó que no iba sobre eso la conversación. Según un artículo publicado por Andrés Pérez en la revista Foreign Policy, que a su vez se basaba en datos del INE, el número de hogares con una sola persona en España aumentó un 82 por ciento en la década anterior. Al parecer, los responsables de marketing orientan campañas de sus productos hacia los singles, porque tienen más pasta para gastar en cosas inútiles, concretamente unos 2.300 euros más al año, porque normalmente no tienen niños, que generan muchos gastos. Intrigado por el tema, me puse a investigar, me enteré de que había una página web sobre el tema, me puse viejos capítulos de Ally McBeal y Sexo en Nueva York, y recuperé una vieja pero excelente película noventera, que se titulaba precisamente Singles, lo que me hizo plantearme, por cierto, qué fue de mi adoradísima Bridget Fonda, que no estrena película desde El beso del dragón, del ya lejano 2001.

Al final llegué a la conclusión de que no. Que no soy un single. Yo soy un solterón de los de toda la vida. Hace diez años cuando me preguntaban decía que era soltero, pero ahora es justo reconocer que lo que soy es un solterón, de esos que se han quedado 'para vestir santos', y a los que se les ha pasado el arroz. Por ejemplo, nadie calificaría de singles a la señorita Rottenmeier, a Miss Marple, o al Papa Benedicto XVI, así que a mí tampoco se me puede llamar así. Yo soy solterón como las hermanas de Marge Simpson o la Doña Rosita, de Lorca.

No es exactamente lo mismo ser un solterón, que un single. Se supone que los singles son esos que visten bien, se les califica de metrosexuales, y por tanto se cuidan para mantenerse jóvenes. Yo visto de cualquier manera, pues apenas me preocuparía la ropa si no fuera a hacer frío por la calle, y las cremas que despiertan mi interés no son precisamente las cremas cosméticas, sino más bien las cremas comestibles, como la crema de calabacín, o la de los pasteles de crema. De tener más dinero que los padres de familia, en mi caso, nada de nada. ¡Si no llego a fin de mes! !Qué digo a fin de mes! No llego ni al quince, desde la entrada en vigor de los euros. Además, se dice que un/a single es uno/a que aprovecha que está solo para ligar y llevarse chicos/as a su casa. Al parecer es la máxima ventaja del single y por lo que suelen envidiarle los que tienen pareja: absoluta libertad en el terreno sexual. Pero yo nunca he ligado nada de nada. Es más, en mi bloque de edificios, alguno que está casado, ha conseguido llevarse más rolletes a su casa de 'estrangis' que yo. Parece que los casados dan más morbo, porque si alguien se ha preocupado por echarles el lazo, será por algo, mientras que los solterones somos como los restos de serie, de esos que venden en Zara, porque tienen taras, es decir, que a lo mejor estamos un poco 'tarados'. También parece que los singles son independientes, y no necesitan a nadie para ser felices, pero a mí me da pereza hasta hacerme una ensalada para acompañar a la comida, si no tengo con quién compartirla, o comprarme un roscón de reyes para mí sólo.

Por último, parece que los singles van a fiestas estupendas, como Carrie Bradshaw, e incluso existen locales concebidos únicamente para ellos, y allí, practican sus propias diversiones, como el speed-dating. El speed-dating es una cosa muy extraña, como se puede comprobar en la divertidísima pero excesivamente sincera La edad de la ignorancia, donde el protagonista conoce con ese método con una mujer que le lleva a un pueblo donde todos van vestidos como en la Edad Media. Consiste en conversar en turnos de siete minutos con otras personas. Cuando acabas de conocer a todas las chicas, marcas con una 'X' si existe alguna a la que quieres volver a ver. Si resulta que ella también te ha marcado a ti, os vuelven a juntar. Pero yo no acabo de ver este método. Como soy un poco particular, la mayor parte de las chicas se aburrirían de mí en dos minutos, y tendríamos que pasarnos los otros cinco mirando a los lados disimuladamente. Además, seguro que yo las marco a todas, y ninguna me marca a mí.

14 comentarios:

bizarro con interrupciones dijo...

Joder, que estrés lo del Speed-Dating, tener que darte a conocer en sólo siete minutos...

Entonces eso como funciona, tendrás que decir a toda carrera tus aficiones, gustos personales, hobbies, forma de ocupar el tiempo libre...y que te de tiempo a que la otra persona te cuente ¿De verdad es así el mundo de los solteros/no arrejuntaos? ¡Que salvaje!

Laura Rodríguez dijo...

Pero eres muy 'salao'. Me has hecho de reir. Oye, no vayas a lo de los siete minutos. Mándame tu telefono por mail a laura_r1988@hotmail.com y te dedico mas de siete minutos, pareces guapino por la foto... escribe mas posts.

Juan Luis Sánchez dijo...

Bizarro: Si a las chicas les sobran seis minutos y medio conmigo. En cuanto me ven y abro la boca ya se han hecho una idea y prefieren pasar al siguiente. Siete minutos es demasiado tiempo, jajajajajaja. Gracias por la visita.

Laura: Gracias, me animas el día. Tú sí que sabes lo que hay que decirle a los treintañeros. Deduzco por el 88 de tu mail que tienes exactamente 20 años, así que en cuanto cumplas 30 te mando el teléfono, el número de comunicador estelar o lo que se use en el año 2018.

belenmadrid dijo...

jajaja juan luis despechado!!! por lo que dices yo sí que soy single, porque he ido a speed-datings y me llevo chicos a casa y en reyes me compré un roscón... ah! y tengo más de 30 años, así que mándame la foto, hombre, no te quedes para vestir santos que me desanimas!!!

un beso y pa lante!! creo que puedes ser single si te lo propones, incluso double! :)

Juan Luis Sánchez dijo...

Hola, Gemi, me alegro de verte por aquí.

Yo también querría llevarme ligues a casa, pero tengo menos éxito que tú, me temo. Como tú, me voy a apuntar a un 'speed-dating' para poder contarlo por aquí. ¡Mira que si coincidimos! Sería una risa. Si te toco, dame conversación, pero no te preocupes, que a ti te perdonaré que no me pongas una 'X', hay confi.

Mi vida en 20 kg. dijo...

Hombre que risa... ya te rendiste.
Una cosa antes de seguir, mira que te leen de todas partes, en Chile que se te pase el arroz es que eres gay, bueno no tengo problemas si lo fueras, pero me da la impresion que no jajaja, te lo cuento por si te vale jiji.
Esto de los single y metrosexual me parece un stress, en lo personal un hombre que se arregle y preocupe tanto de su apariencia personal me desagrada...es que no veo a mi marido comprando cremas mas caras que las mias jajaja...ud guapo quedese asi y que ya llegara su media naranja para comer ensaladas juntos y si no es asi, espero al menos que tengas sobrinos que te cuiden en la 3º edad jijii....
Geminis es una buena opcion o no???

Besitos

Juan Luis Sánchez dijo...

Jajajajaja, no sabía que en Chile la expresión 'se te ha pasado el arroz' significa que eres gay. No, yo no soy gay, es que en España esa expresión es muy machista, se usaba tradicionalmente para las chicas y significaba que se habían hecho demasiado viejas para usar marido. Por eso la uso conmigo, porque me he hecho demasiado mayor. Hay que tener cuidado con el idioma. En México coger significa practicar el sexo, y da lugar a muchos equívocos. Cuando decías que ibas a coger el autobús, te preguntaban que si por el tubo de escape.
Géminis es muy maja. Como dice que ha ido a eso del 'speed dating' con un poco de suerte me llevará a una un día de estos y conoceremos a nuestras medias naranjas.

belenmadrid dijo...

venga, vale, yo te llevo al speed dating, voy a buscar uno :)

Juan Luis Sánchez dijo...

Gracias, guapina. Será toda una experiencia. Seguro que es díver. Avísame cuando encuentres uno. Entiendo que 'llevarme' al speed dating sólo incluye que me acompañas hasta allí, y luego a la vuelta te vas con el tío buenorro que hayas elegido. Pero será algo 'diferente' y así lo puedo contar en el blog.

Juan Luis Sánchez dijo...

Gracias, guapina. Será toda una experiencia. Seguro que es díver. Avísame cuando encuentres uno. Entiendo que 'llevarme' al speed dating sólo incluye que me acompañas hasta allí, y luego a la vuelta te vas con el tío buenorro que hayas elegido. Pero será algo 'diferente' y así lo puedo contar en el blog.

belenmadrid dijo...

jajajajajjajaja de verdad, me rio por no llorar.. tú estás fatal!!!

te diré algo que quizás te ayude: no, no me iré con el tio buenorro, me iría con el típico feillo pero gracioso, o muy feo pero alto, o muy raro pero con encanto... el secreto de ligar es saber 'cual es tu liga' ;)

Juan Luis Sánchez dijo...

Agradezco tu consejo y prometo que buscaré algo que se pueda vender de mí, al estilo de los ejemplos que dices, que desgraciadamente no se me pueden aplicar. Soy más bien feo, pero soso y bajito. Era de estatura media hasta la llegada de la generación del petit suisse. A ti también te voy a tener que dar mi messenger, porque hablo contigo casi en directo. Me voy a trabajar, que sino no salgo de aquí hasta las mil.

Enrique Nieto dijo...

Yo pensaba que este blog estaba poniéndose insuperable; pero los comentarios le están haciendo competencia. Qué ratejo más bueno.

Anónimo dijo...

El término single ha tenido tanta aceptación por venir del inglés, la lengua dominante en Occidente, y porque suena mucho mejor que el tradicionalmente despectivo "solterón".

A nadie le gusta etiquetarse como solterón, porque es un término con fuertes connotaciones negativas, pues no sólo se refiere al hecho de permanecer soltero a partir de cierta edad, sino que suele ir unido a ciertos rasgos de la personalidad, como aspecto descuidado, carácter extrsvagante y maniático, que dificulta la convivencia con otras personas, o mentalidad inmadura y de eterno adolescente, frente al casado y con hijos, que lleva una vida con más responsabilidades.